TODO AL NEGRO
Si has pensado en apostar todo al negro en tu baño el mercado te lo pone fácil: lavamanos y griferías dejan a un lado los acabados brillantes del acero y la porcelana para teñirse de oscuridad. Eso sí, el cuidado de estas piezas es constante para evitar que queden sucios por manchas de cal y restos de jabón.
Una de las grandes propiedades del color negro es que todo lo que pongas junto a él resaltará, el color negro puede recompensarte en muchos aspectos, pero evita su uso en los techos en la medida de lo posible. Si bien es cierto que provoca la ilusión de que el techo no está tan alto puede crear una desagradable sensación de claustrofobia, así que si tienes vigas vistas evita camuflarlas bajo este tono.
Conseguir iluminar un interior negro es más agradecido porque el contraste es mayor, no es lo mismo iluminar blanco sobre blanco que hacerlo sobre un fondo negro. Si escoges las lámparas adecuadas el resultado será impactante porque las sombras quedan matizadas.
Los grandes nombres del interiorismo usan elementos como piezas de mobiliario, o el color para conseguir que una estancia tenga una dimensión intelectual. El negro aporta elegancia y al mismo tiempo invita a la introspección, así que vuélvete atrevido y úsalo sin miedo.
Existe una teoría por la cual en una vivienda es mejor crear espacios diáfanos en lugar de compartimentarlos; la mejor forma de dotar de continuidad a una casa sin divisiones el color o el no color como el negro.
En la cocina los elegantes delantales negros de los grandes chefs inspiran esta cocina de aires minimalistas. Una de las máximas de los grandes nombres de los fogones es el orden, así que el uso de un único color puede jugar a tu favor y acompañarte para que tus recetas resulten exquisitas.